Fisioterapeuta, Técnica Superior en Medicina Tradicional China y ahora también Acupuntora Descalza. Teresa, nos acompañó como voluntaria en nuestro paso por Grecia en la colaboración que realizamos con la ONG Together for Better Days en el proyecto Elpida (Un «campamento» digno para refugiadxs») y ahora nos deja unas palabras tras reflexionar a su vuelta.
“Mandando un mensaje por Facebook a la ONG “ling Tao Acupuntorxs Descalzxs”, fue como empezó mi aventura griega. Algo así como» me voy con vosotrxs a Grecia!!!!, no quiero imaginar la cara de Marta, la fundadora de la ONG, con mi mensaje claro y directo, y viniendo de alguien que no había visto en la vida!!!!!
Unos cuantos viajes a Madrid, y a Alcázar de San Juan, fueron suficientes para darnos cuenta que esto sólo era el principio de una maravillosa aventura.
2 de julio de 2016, aeropuerto de Barajas, cosquillas en la barriga, comenzamos!!!
Tras unas 9 o 10 horas de viaje, legamos a Tesalónica!!!! Directamente nos fuimos a Elpida factory, el campo de refugiadxs donde íbamos a trabajar…
Elpida, un rayo de esperanza y dignidad en un terrero de desesperación y sueños rotos…
Nosotrxs éramos “the acupuncturists», pero debido a que los refugiadxs no llegaban, por temas burocráticos, formamos parte del equipo de carpintería! Lo mismo daba clavar una aguja que un tornillo!!! O del equipo de limpieza, donde recuerdo uno de mis mejores días allí…
Da igual lo que se hiciera, se ponía todo el corazón y la magia aparecía!!!!
Las tardes las pasábamos en Elpida descubriendo nuevas aficiones, trabajando duro, pero parecía que una fuerza sobrenatural nos daba ganas, alegría y entusiasmo para hacer lo que hubiera que hacer…
Las mañanas…Las mañanas eran otra historia… Os imagináis viviendo en una nave abandonada, en las afueras de cualquier ciudad, donde apenas llegan autobuses, en tiendas de campaña, hacinadas unas con otras, con la ropa de invierno que cogiste con las prisas, por que las bombas llamaban a tu puerta, Donde el portero de casa es el ejército griego…y si quieres que pasen tus «amigxs» a casa, tiene que ser saltando un muro, como si estuviesen cometiendo un delito… Donde la intimidad quedó en algún lugar perdido, y la esperanza …Ay! donde quedó la esperanza!…Día tras día, esperando una solución a su problema.
Que huyen de una guerra! Es que acaso estamos sordxs?? Oímos pero no escuchamos! Miramos pero no vemos, sentimos…
Sentimos??
Creo que cualquier persona que conociera a alguna familia de refugiadxs, se lxs querría llevar a casa… Por encima de cómo está el mundo, creo y quiero creer que sigue habiendo gente buena, dispuesta a seguir creando un mundo lleno de luz, a ser farolas en una fría noche de invierno…
Y esta pequeña ONG lo está consiguiendo.
Gracias x hacerlo posible…
Alguien dijo una vez: Sólo tengo lo que di.”
María Teresa Ramos
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